Este vino procede de una selección de viñas muy viejas, más de 70 años, ubicadas en suelos con 50 cm. de cantos rodados, debajo de los cuales se encuentra un subsuelo arcillo-calcáreo. Nuestras viñas coronan las partes altas de la orografía del Valle del Pisuerga a 790 metros de altitud. Rendimientos entre los 1.000 y los 3.000 Kg./ha, podas cortas y abonados con materia orgánica, en definitiva, se continúa con la viticultura de nuestros antepasados.
Estas características junto con un clima duro, de grandes contrastes de temperatura entre el día y la noche durante los meses de verano, inviernos largos y muy fríos, con fuertes heladas primaverales, hacen que las uvas obtengan una sanidad y una madurez alcohólica y fenólica que casi rozan la perfección.
Ciclo vegetativo: Un invierno con fuertes heladas (hasta -16 ºC.) que se prolongaron incluso hasta el mes de mayo con -6 ºC, y una escasez de lluvias en los periodos críticos regularon la cantidad y la sanidad de la cosecha.
Los fuertes contrastes de temperatura en los meses de julio y agosto, con oscilaciones entre los 6 y 42 ºC se encargaron de culminar el trabajo de maduración de la uva, para dar lugar a "la añada perfecta".
ELABORACIÓN
Tras la vendimia manual en cajas y su paso por las mesas de selección la uva fue despalillada pasando a depósitos de acero inoxidable de 15.000 Kg. Fermentó a 29º C. Control de temperatura, análisis, remontados y catas diarias de los mostos decidieron el momento del descube, produciéndose éste a los 21 días con el fin de lograr el máximo de extracción de aromas y color, preparando así al vino para su larga y esmerada crianza
CRIANZA
22 meses de barrica nueva francesa, con frecuentes trasiegos y rellenos, condiciones óptimas de higiene, temperatura y humedad, sin trepidaciones, en silencio, dotan a este vino de una complejidad, redondez y armonía que lo hacen diferente.
Consumir preferentemente entre 13º y 16º
Un caldo excelente para asados carnes a la brasa y para disfrutar alrededor de una mesa con amigos
Calificación oficial: Excelente
VISUAL: color picota de capa alta. Al inclinar la copa mantiene un ribete con matices morados.
AROMA: Recuerdos de fruta roja, grosella, arándanos. De carácter muy atlántico. Al mover la copa, aparecen matices de regaliz salado, jengibre, salvia, fondo de especias. junto con matices minerales y torrefactos.
PALADAR: Ataque potente y con nervio que desarrolla múltiples sensaciones que lo hacen muy sabroso y armónico. En el retrogusto, el vino es muy largo, reapareciendo recuerdos de avellana tostada que enlazan con matices minerales y de maderas exóticas en vía retronasal.